Tres importantes ejes marcan, desde su nacimiento, la filosofía imperante en el celler Castell de Biart; una apuesta hacia la innovación, con respeto, pero, a la más arraigada tradición vitivinícola ampurdanesa; un seguimiento del cultivo basado en la conservación, pero sin olvidar la experimentación con nuevas variedades que puedan potenciar cualitativamente los resultados de las composiciones; y, finalmente, la firme voluntad de acogerse a las directrices marcadas por la DO Empordà-Costa Brava, sello indiscutible, que garantiza los atributos requeridos en el producto.
Los vinos Castell de Biart son el resultado de la confluencia del rigor y el cariño abocados en la consecución de un noble producto.