Según documentación que se conserva y que se ha podido recopilar de la época, el Castillo de Biart era una enorme fortaleza de la época;
Pere de Biart, su esposa Maria y su hijo Gasto V, vivieron en el mismo, de donde viene su nombre “CASTELL DE BIART”.
Derruido por las invasiones Napoleónicas, quedo prácticamente en ruinas, siendo durante décadas campo de pastoreo; posteriormente se plantó viñedo, al ser una zona adecuada para este tipo de cultivo.
En la actualidad se está reconstruyendo la Fortaleza y se intenta que vuelva a su esplendor inicial sus Murallas, su Iglesia, la Prisión, la gran Plaza de Armas con su cañón de defensa, las Torres de Defensa, la Biblioteca, el Ayuntamiento o Concejo, de la misma manera que sus Bodegas subterráneas conformando todo ello un enorme conjunto monumental, que servirá de visita obligada en la gran ruta del vino del Empordà .